Internet nos permite conocer los comportamientos de nuestros clientes hasta puntos que en un negocio físico siempre habían sido impensables. Podemos conocer las fuentes de entrada, los dispositivos de navegación, por qué secciones han navegado, que búsquedas de internas han realizado, por encima de que elementos han pasado el ratón, dónde pinchan, hasta que altura del scroll vertical llegan, su ubicación física, cuál es la página desde la que se van, …
En definitiva, disponemos a nuestro alcance ingentes cantidades de información de nuestros visitantes que analizados por ojos expertos son una verdadera mina de oro.
Nosotros siempre nos obsesionamos en dos conceptos para analizar estos datos:
– ROI:  Si hacemos inversiones de marketing queremos conocer exactamente cuanto retornan y que inversiones son más eficientes para invertir en aquellos medios  que más rentables sean.
– Índice de conversión. Aprovechando el conocimiento del cliente, tomar acciones que permitan aumentar nuestras posibilidades de consecución de objetivo. En este punto, aspectos como la página de aterrizaje, las informaciones relacionadas o las ventas cruzadas o una estrategia de bussiness intelligence aprovechando el conocimiento que nos aporta el data mining.